lunes, 30 de mayo de 2011

La Stupa de Benalmádena

La llamada  estupa de la Iluminación, es un monumento budista para la paz, la prosperidad y la armonía del mundo, y un excelso lugar para la meditación. Esta estupa se inauguró el 5 de octubre de 2003 gracias a los deseos del gran maestro budista de los Himalayas, Lopon Tsechu Rinpoche.
La estupa de Benalmádena tiene 33 metros de altura y una base con un ancho de 25,8 metros. Incluye, en su interior, una sala de meditación de más de cien metros cuadrados.
Desde el techo de la sala de meditación hasta la cima de la sombrilla bañada en oro, la estupa está completamente llena de objetos sagrados. Sus contenedores (cuartos del tesoro), sellados para siempre, contienen entre otras cosas:

  • 6.000 imágenes budistas de arcilla fabricadas por dos estudiantes occidentales de Rinpoche, que representan seis aspectos búdicos diferentes:
    • Al Buda histórico, Sakyamuni.
    • A Chenrezig (Ojos Amorosos) de mil brazos.
    • A Sangye Mitukpa.
    • A Sangye Menla, el Buda de la Medicina.
    • Al Buda Amytayus o Buda de la Larga Vida.
    • A Dorje Sempa, el Buda Mente de Diamante.
  • Media tonelada de plegarias budistas impresas en papel de algodón.
  • Las enseñanzas completas del Buda Sakyamuni o Kanjur (108 volúmenes) y las explicaciones completas de estas enseñanzas o Tenjur.
  • El árbol de la Vida, un árbol de 17 metros de altura, especialmente trabajado para el efecto, y ubicado verticalmente en el centro de la estupa. Representa la columna vertebral del Buda, cuando la estupa se interpreta como el cuerpo del Buda, o el Axis Mundi (el eje del mundo), en los casos en que la estupa se interpreta como el universo en su conjunto.
  • Innumerables objetos y reliquias sagradas traídas de los más santos lugares budistas de los Himalayas.
  • La más preciosa reliquia en la estupa es una reliquia del Buda Kashyapa, el Buda anterior a Sakyamuni.
  • Una pequeña Tsa Tsa (estatua de arcilla) hecha por Milarepa, el más famosos yogui tibetano de todos los tiempos, (siglo 11 de nuestra era).
Las pinturas de las paredes de la sala de meditación representan la historia de vida del Buda Sakyamuni, el Buda histórico y fueron elaboradas en seis meses por artistas originarios de Nepal.